martes, 8 de julio de 2014

Los Bancos de Amor


El otro día leí un cuento de una niña que iba a un banco en el que en vez de ingresar dinero había que ingresar abrazos, y para reembolsarlo solo debía de abrazar a otras personas en cualquier parte.
A mi me ha encantado este cuento... sabéis porque?, porque da al abrazo el valor que realmente tiene.

Nunca pensamos realmente en lo que valen los abrazos... hasta que necesitamos uno.
Ese es el problema de las cosas a las que no les damos el valor que tienen desde el principio: que las damos por hechas; y con los abrazos pasa un poco lo mismo.
La importancia de un abrazo es tanta que los recién nacidos no pueden vivir sin los abrazos de su madre, y, esta comprobado que un abrazo nada más levantarse nos hace afrontar mejor la jornada laboral.
Lo que más me sorprende es a veces lo que cuesta dar abrazos... no sé como si nos costara un mundo.
Por eso me gusta la idea del Banco de Abrazos; cuando necesitásemos uno de urgencia podríamos ir allí y coger los que hayamos guardado. Podría haber sucursales de los bancos, y que estés donde estés puedas ir a buscar tus abrazos... y, es que un abrazo se necesita cuando menos te lo esperas.


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lunes, 7 de julio de 2014

La Casa Mágica de Pablo Neruda en Isla Negra



... El Océano Pacífico se salía del mapa.
No había dónde ponerlo. Era tan grande, desordenado y azul que no cabía en ninguna parte.
Por eso lo dejaron frente a mi ventana...

Pablo Neruda se enamoró del mar; era un marinero en tierra firme, decía de si mismo, por eso compró la casa de Isla Negra, y allí escribió sus mejores versos.
... Me rodea el mar, me invade el mar: somos salobres, mesa mía, pantalones míos, alma mía: nos convertimos en sal...

La casa la compró Neruda en 1.939 a un viejo navegante español aunque tuvo que terminar de construirla; esta situada en la comuna de El Quisco, provincia de San Antonio perteneciente a la Región de Valparaiso;
hoy, se conoce a esta zona como " El litoral de los Poetas".
En este entorno escribió sus más bellos versos, muchos de ellos inspirados en su última esposa, que lo acompaño hasta el final de sus días, Matide Urrutia.
... Luego la casa fue creciendo, como la gente, como los árboles...




A la entrada misma nos encontramos con el " Locomóvil", una máquina de locomotora con la que el poeta quiso rendir homenaje a su padre que era conductor ferroviario y hacia la ruta entre Temuco y Santiago.
La casa es un barco varado en la tierra, lleno de mascarones de proa rescatados de viejos barcos, maderas que chirrían bajo nuestros pies y olor a salitre. También colecciones de fantásticas conchas y botellas de raras formas.
Un dia, Neruda, quiso que los mascarones del pirata Morgan y Jenny Lind se enamoraran y los puso frente a frente, cada uno en su pared mirándose... pero nunca se enamoraron. El poeta decía que era porque Jenny siempre miraba al mar, y ni tan siquiera se fijo nunca en Morgan...
En el comedor encontramos la mesa puesta con vasos de colores porque como al poeta le gustaba decir " el agua sabe mejor en colores". Parece que de un momento a otro la estancia se va a llenar de risas, de tertulias de los amigos que entraban y salian. Neruda decía que en su casa estaba prohibida la tristeza.
Y, también estaba prohibido entrar a la cocina. Decía que era un lugar sagrado, por ello a nadie permitía entrar; hoy en día la estancia tampoco se puede visitar para preservar el deseo del poeta.
Seguimos avanzando por las estancias repletas de recuerdos del poeta... colecciones de mariposas, de pipas, de sombreros, y llegamos a una sala construida exclusivamente para un caballo...este caballo construido en cartón piedra procede de Temuco, donde Neruda lo veía en una tienda y acariciaba sus sedosas crines. Muchos años después la tienda se incendió y en cuanto se enteró inició un viaje a Temuco donde compró el caballo y lo trajo a Isla Negra; A consecuencia del incendio el caballo había perdido su sedoso pelo; le construyo una habitación y le hizo una fiesta de bienvenida en la que sus amigos tendrían que traer algún regalo. Al final había tres colas de regalo y como Neruda no quería ofender a ninguno de sus amigos le puso las tres colas y se convirtió en " el caballo más feliz del mundo".
De repente la casa deja de convertirse en un barco para convertirse en un tren de pasillos estrechos que nos lleva a la sala donde escribía apoyado en una mesa que había sido una puerta de la bodega de un barco que el mar embravecido arrastró hasta la costa y el y Matilde vieron desde el ventanal de cristal de su habitación y lo rescataron.

... Así perdí la llave, el sombrero, la cabeza.
Se los llevó el océano en su vaivén.
Una nueva mañana las encuentro.
Porque me las devuelve una ola mensajera que deposita cosas perdidas a mi puerta.
Así, por arte de mar, la mañana me ha devuelto la llave blanca de mi casa, mi sombrero enarenado, mi cabeza de naúfrago...

La habitación de Pablo y Matilde es un lugar mágico de grandes ventanales que miran a la inmensidad del océano, para divisar los días de sol y los días de tormenta; parece que nuestros sueños pueden tocar las estrellas...

... Hay un cierto placer en la locura, que solo el loco conoce...

En el jardín esta el barco que nunca salió a la mar y que el poeta utilizaba para estar con sus amigos en tierra firme. Al lado el campanario con que saludaba a sus amigos marineros repicando alegremente las campanas.

Y, al final del todo, la tumba mirando al mar en la que descansan Pablo y Matilde juntos para siempre.

Compañeros, enterradme en Isla Negra frente al mar que conozco, a cada área rugosa de piedras y de las olas que mis ojos perdidos no volverán a ver...

Es un viaje único a la casa de uno de los más grandes poetas... podemos sentir su presencia a través de las habitaciones, de sus objetos... y si vemos una sombra quizá sea el propio Neruda que quiere darnos la bienvenida a su casa...


... Muere lentamente quién no viaja, ni lee, quién no sueña, quién no confía, quién no lo intenta...
Pablo Neruda ( El Parral, 12 julio 1904- Santiago de Chile, 23 septiembre 1973)